3.07.2012

Seguridad sustentable y estructura de dominación

Enrique M. Del Percio 

Al acuñar un concepto nuevo con resabios de concepciones anteriores resulta indispensable alertar acerca de lo que éste no significa: no se entiende por seguridad sustentable ni la mera represión, ni la prevención inmediata del delito. Apunta sí a la indagación acerca de los factores sociales, políticos, jurídicos y culturales que garantizan o, en su caso, amenazan- la vigencia de la paz social. En tal sentido, este nuevo concepto guarda un estrecho parentesco con el de paz, entendida como la "tranquilidad en el orden", siendo en este marco el "orden" el fruto de la justicia. 

 Por cierto, la actual demanda ciudadana en torno a la seguridad está referida prioritariamente a la disminución del delito, principalmente contra la integridad física y la propiedad. Naturalmente, urge dar pronta respuesta a esta demanda. Pero también se impone un accionar responsable por parte de los distintos actores políticos y sociales en orden a la erradicación de las causas que generan un marco propicio para el incremento de la delictividad. Este "accionar responsable" hace referencia a una esfera de actividades en la que los resultados no siempre se pueden ver en el corto plazo, e incluso, a veces implica la asunción de estrategias indirectas de largo aliento para abordar problemas cuya resolución específica está más allá de la voluntad de los partícipes de ese proceso. Para decirlo gráficamente, si bien es empíricamente demostrable aquella vieja afirmación según la cual "cuando los templos y las escuelas están llenas, las cárceles están vacías", la posibilidad de "llenar" templos y escuelas no está en las manos de nadie (y además no está mal que así sea). 

Pero se requiere una adecuada comprensión de las causas y factores que llevan a las sociedades contemporáneas a la actual situación, con todas sus ventajas y desventajas. Afortunadamente, se ha ido gestando un importante consenso en torno a la aceptación de la inseguridad como un fenómeno que responde a múltiples causas: el incremento de la marginalidad, la pobreza y el hacinamiento; la drogadicción y sus efectos en el accionar de los criminales; las nuevas técnicas incorporadas en el accionar criminal; los efectos de la globalización en la vida cotidiana y laboral de la población; la creciente disgregación de la familia; la falta de un serio abordaje de la problemática de la minoridad; la existencia de falencias en el sistema educativo; el debilitamiento del principio de autoridad; la existencia de falta de confianza de la ciudadanía en las instituciones estatales, la inexistencia de una adecuada red de contención social; la inexistencia de confianza y de una adecuada comunicación entre la ciudadanía y la policía; la existencia de una crisis de valores o carencia de valores en la sociedad (1) , son algunos de los factores usualmente mencionados como agentes etiológicos de la inseguridad.

Tal cantidad de elementos puede derivar en una parálisis motivada por la imposibilidad tanto de la comprensión de los mismos como de las medidas tendientes a darles respuesta. Por eso es importante sistematizarlos, tratando de ver cuáles son los aspectos causales y cuáles los resultantes. En otros términos: no cabe duda de que cualquier política coherente de seguridad que se encare debe tener esto muy en cuenta; todos sabemos que para atacar las manifestaciones más violentas del fenómeno de la inseguridad en forma inmediata, se deben contratar más agentes policiales, pagarles y capacitarlos mejor y construir más cárceles, lo cual por cierto no es gratuito sino que demandaría un importante sacrificio fiscal. 

Al mismo tiempo, también es sabido que el reclamo de soluciones de urgencia corre el riesgo de caer en un mero reclamo de mayor represión desplazando la posibilidad de pensar en otras políticas, tales como las que pueden incidir en la disminución del ingreso de grupos en riesgo en la actividad delictiva.

La educación es perjudicial

El trabajo intelectual se degrada: aunque cada vez se produce más saber, son menos los que pueden vivir de su trabajo Andrea Roedig * Sociedad del conocimiento es una linda expresión. Suena bien, pacífica, como a un mundo, en el que los hombres con libros u ordenadores portátiles bajo el brazo, se deslizaran hacia ella en una gran biblioteca, y todo el día no hicieran otra cosa que adquirir conocimiento, y producir saberes. Suena como si la sociedad finalmente hubiera llegado a la tierra prometida, como si se hubiera terminado la mugre de la industria y la sociedad del trabajo. Como si todos tuviéramos el derecho al privilegio del trabajo intelectual. Suena a una valoración de la inteligencia y la sensatez. Suena realmente bien. Muchas utopías se unen a la idea de sociedad del conocimiento, que esencialmente no anuncia otra cosa, que el bienestar del primer mundo, en el futuro descansa sobre “knowledge based economies”. En estas, el saber deviene un recurso clave, nueva fuerza productiva por excelencia. El saber genera valor agregado, el saber reemplaza al trabajo – el saber es el nuevo trabajo. Consecuentemente sube también el valor de la “educación”, ésta deviene un bien irrenunciable. Por ello los políticos, economistas, sociólogos, pedagogos y, sobre todo, la OCDE, escriben desde hace años ya sobre cada espacio publicitario disponible: “Educación, inversión en conocimiento, es el futuro”. Primero, este principio vale para cualquier conocimiento adquirido. Una formación es mejor que ninguna formación. Las estadísticas dejan claro que los académicos ganan más, y es más raro que no encuentren colocación, que sus colegas que sólo han seguido estudios orientados a oficios o tecnicaturas, y, triste contracara de la moneda, que las personas sin diploma secundario ya prácticamente no tienen oportunidades. El asalto a las universidades prosigue sin interrupciones, aunque la OCDE sigue descontenta en sus informes anuales “Education at a Glance”, como si hubiera que organizar una completa academización de la sociedad. El dilema de Kullmann El elogio del valor general de la educación es de todos modos tan poco fundado, que no dejan de haber dudas y críticas. Si todos estudiaran, a la larga o a la corta, el valor exclusivo de lo académico bajará, o bien tendrá lugar una competencia intensiva que tenderá a bajar los valores. Bourdieu denominó esto como la “ilusión educativa”. Justamente no encajan bien, en este cuadro que se nos ofrece, la decisión del tribunal constitucional federal (La Corte Suprema alemana), de votar “sueldos-dumping” para profesores de nivel terciario que comienzan su labor. También da que pensar, el hecho de que en las protestas de los indignados en España, fueron sobre todo jóvenes con alto nivel educativo los que fueron a las calles, ya que tenían muy pocas oportunidades de trabajo. Tampoco encaja muy bien en el cuadro que nos pitan, la así llamada “Generación-Pasantía” en Alemania, que pasa meses e incluso años prestando sus servicios gratuitamente, ni las precarias relaciones de trabajo de los nuevos profesionales independientes, ni los que se encuadran dentro de “ocupaciones atípicas”, de quienes sabemos que son crecientemente personas que se ubican muy alto en la escala educativa. La tan mentada “demanda de universitarios”, por un lado, y “la vuelta a relaciones de trabajo normales”, por el otro, tomadas juntas no tienen ningún sentido, y si lo tuvieren, es uno muy inquietante. Todas estas discordancias pueden ser reducidas a una muy simple pregunta: ¿Qué trabajo intelectual se paga realmente en la “sociedad del conocimiento”, y por qué a algunos se les paga mejor que a otros? El último año Katja Kullmann ha dejado claro en su libro Vida real (Echtleben), lo que significa creerle ciegamente a la promesa educativa. El libro puede tener carencias y desear demasiado, en algunas partes, de forma auto-conmiserativa una vuelta a la vieja República Federal. Sin embargo, retrata con exactitud la situación de los treintañeros instruidos cuyos proyectos de vida parecen estar al borde de un precipicio. La situación de extrema precariedad de los trabajadores de la cultura, periodistas, diseñadores y arquitectos ha devenido un fenómeno generalizado, y frecuentemente comentado, aunque más no sea de mala gana. Kullmann describe en él un dilema muy típico, ella podía decidirse, o bien por escribir buenos textos viviendo una existencia de “nivel Hartz IV”, [1] o bien por escribir porquerías que estaban muy por debajo de su nivel intelectual en una posición pagada excelentemente. Entre las dos opciones nada. ¡Sigue tus sueños! El mencionado dilema se pone más peligroso bajo la presente ideología de responsabilidad personal en el camino al éxito. ¡Sé fiel a ti mismo! ¡Intenta lo imposible! ¡Sigue tus sueños! Aceptar un trabajo no cualificado, significa renunciar en parte a los logros educativos alcanzados. De esa forma ha sido puesto en marcha el movimiento descendente de des-cualificación. Estudios sobre el estado de las cientistas de humanidades no ven la situación en forma tan crítica. Según una valoración de la Facultad de Sistemas Informáticos (HIS), cerca del 40% de los graduados en ciencias humanas toman una posición no adecuada a su formación cuando comienzan su carrera laboral – en comparación con el 20% de empleo inadecuado en los graduados universitarios en total. La cuota baja a continuación a un tercio de los graduados en ciencias humanas con empleos no adecuados a su formación. Kolja Briedis, director de proyecto en el campo de trabajo Investigación de Graduados de HIS, no hablaría de una tendencia general a la precarización, “eso no se correspondería con los números”, afirma él. De todos modos los graduados en Humanidades están cada vez más trabajando con contratos de corto plazo y por horas. La proporción de trabajadores independientes crece entre ellos, y el ingreso medio anual de 22.500 Euros está un tercio por debajo del de los graduados universitarios en conjunto. Los que trabajan en forma independiente, deben arreglárselas en promedio con 18.500 Euros anuales, lo que está exactamente en el medio del nivel salarial anual de un peluquero (15.000 Euros) y del de un productor de embutidos (23.000 Euros). “Bien” se dirá, “con las humanidades nunca se pudo ganar mucho dinero”. Pero es sorprendente que esto no parezca cambiar bajo las condiciones de la sociedad del conocimiento. El conocimiento pierde valor Que el trabajo basado en las ciencias humanas no logre obtener mucho valor agregado, es consecuencia por un lado, de la históricamente creciente sobrevaluación monetaria de los sectores técnico, económico y (en parte) de las ciencias naturales. Un segundo error de sistema está, por otra parte, en un desarrollo, que en “nuevo alemán” podríamos denominar “Outsourcing de Content”, y que a la corta o a la larga no sólo afectará a las ciencias humanas, sino que abarcará el trabajo intelectual en su totalidad. En los últimos años, los empleos con contratos por tiempo indeterminado se han concentrado en las funciones puramente administrativas (de Management), no sólo en las organizaciones económicas, sino también en periódicos, editoriales, universidades, y establecimiento educativos. En las universidades, por ejemplo, los puestos de investigación y enseñanza son siempre anunciados con plazos de término, mientras que los puestos por tiempo indeterminado están en las nuevas áreas como “manejo de calidad” y asesoramiento para la promoción de la investigación. ¿Qué está pasando entonces? No se pagan los contenidos, sino la administración de contenidos, no el conocimiento, sino la administración del conocimiento. Pero los contenidos, de los cuales en realidad se podría decir, dependería de ellos, que frecuentemente producen las personas que ocupando puestos precarios, o que como voluntarios no pagos, producen Content. El horrible sentido oculto de este proceso, en el que el conocimiento se transforma en trabajo, es que a la larga o a la corta los productos del trabajo científico son sometidos a la misma lógica de obtención de ganancias que todas las otras mercancías: pierden valor. El capital apuesta a la masa, el rédito más alto sólo se garantiza mediante la reducción del precio unitario y la elevación del número de piezas. Es lo que sienten todos los trabajadores intelectuales que no clasifican dentro de la categoría “Celebrity”. Su trabajo -desde el trabajo de prensa, hasta las publicaciones científicas- cae necesariamente dentro de la rueda fordista. Producir más rápido a cambio de menor remuneración. Otra analogía con la producción de bienes materiales llama la atención, pues el valor agregado del producto nunca lo se lo quedan los productores. A este respecto, no se diferencian el autor de un libro y el campesino cafetalero colombiano, que también gana a sus granos menos de lo que lo hace el comerciante. Yogur boloñés ¿Por qué no protesta nadie, por qué no se han parado las maquinarias, por qué los autores continúan escribiendo, por qué se van colgando los productores de documentales de una subvención tambaleante a otra, por qué los docentes privados cubren gran parte de la docencia universitaria a cambio de una lamentable compensación por gastos? Es conveniente que los académicos orientados a los contenidos tengan una motivación propia bien alta. Encajan perfecto en el régimen neoliberal de responsabilidad individual, como lo describen, entre otros, Jan Masschelein y Maarten Simons en su libro Inmunidad Global. El imperativo de lograr lo máximo posible de la propia vida, hace de los trabajadores independientes tipos muy manipulables, funcionan como máquinas gratuitas bien aceitadas de producción de conocimiento. Entretanto crece el mercado educativo, es decir, la venta de la mercancía “educación”, y de manera absurda algunos trabajadores intelectuales y de la cultura ganan dinero enseñando a las personas algo, que no los puede alimentar a ellos mismo: a escribir por ejemplo. “El conocimiento siempre tiene buena coyuntura” anuncia el instituto de promoción profesional austríaco BFI, y qué cierto esto: Luego de las reformas de Bolonia los cursos universitarios se han diversificado como los yogures en las góndolas de los supermercados. “Ciencia de la Caridad”, “Humanidades Digitales”, “Semiótica del Texto y la Cultura ”,“Economía Cultural”, o “Manejo de la Hospitalidad”, están de oferta. ¿Qué tan estúpidos somos? Todo esto puede en realidad ser poco duradero, pero técnicamente está adaptado al mercado laboral. Y el viejo Canciller Otto von Bismarck, que temía un peligroso proletariado académico (sí, tan viejo es el tema), se tranquilizaría de saber, que quien anteriormente se graduaba como científico social, ahora encuentra un empleo como investigador de opinión “Senior Research Manager”, para realizar “investigación etnográfica internacional automovilística” o “análisis semiótico de bienes de consumo” ¿Qué tan estúpidos somos entonces? El dilema de Kullman de la elección entre una inteligencia precaria o estupidez pagada permanece, inclusive la poco consoladora perspectiva, para los científicos sociales y de Humanidades, de tener que llevar a cabo justamente las actividades contra las cuales se querían oponer mediante la propia elección de sus estudios universitarios. La tan invocada falta de trabajadores especializados y académicos, no se refiere a las ciencias humanas, eso está claro. En este campo, hay claramente más personas inteligentes que puestos de trabajo razonables. Esto significa también, que la sociedad del conocimiento no trabaja a la altura de su potencial intelectual. Pues la calidad se vende mal, y se podría aplicar el hermoso concepto de Georg Seeßlens de las “máquinas de estúpidos”, para determinar, que aquí la educación sólo hace mal. Nota del Traductor: [1] Hartz IV hace referencia a las propuestas ya implementadas de la Harz Komission, comisión que tuvo por objeto elaborar una serie de propuestas destinadas a la neoliberalización del mercado laboral en Alemania, sus medidas fueron aplicadas en forma escalonada desde el año 2002. * Filósofa, ensayista y periodista. Trabajó hasta 2006 como responsable de las páginas culturales en el semanario Freitag de Berlín. Desde 2007 vive y trabaja en Viena. Fuente: Freitag, traducción para www.sinpermiso.info: Francisco Zabala.

Bolivia: Clima y política

La Mesa 18 y el éxito de la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre el Cambio Climático Emir Iskenderian Aguilera * Se expresó la idea en la frustrada cumbre climática de Copenhaggen y hoy ese pensamiento se realiza. Cobra forma material y movimiento propio. La realidad ha sido transformada por la acción política conciente, superando las primeras expectativas. El fenómeno adquiere símbolos y contradicciones. Sumando voluntades llegamos a un punto sin retorno. Estamos propios y extraños atentos a la Conferencia Mundial de los Pueblos y los Derechos de la Madre Tierra, en Tiquipaya, Cochabamba. Nos empuja la conciencia de una crisis climática sin precedentes en nuestra memoria colectiva inmediata. Grandes polémicas asoman su rostro: ¿Calentamiento o Enfriamiento?; ¿Capitalismo o Comunismo? 1. La Mesa 18 y el éxito del evento En el Portal Web del evento hay inscritos cerca de 10.000 personas. Vendrán representando las múltiples facetas de más de 140 países. Hay confirmada la representación de ministros, presidentes o secretarios de 37 Estados. Debatiremos en mesas de trabajo y paneles sobre mercados de carbono, justicia climática, producción agrícola, deudas, tribunales, entre otros asuntos. Por otra parte habrán cerca de 200 eventos autogestionados de variada índole. Muchos haremos una segunda mirada a la "inexistente" Mesa de Trabajo 18, dedicada a los conflictos socio-ambientales y derechos colectivos en Bolivia y el mundo. Tendrá su carpa ubicada - con temple de protesta - a las puertas de la Universidad de Tiquipaya. Es conocido ya el impasse entre organizaciones indígenas con el Gobierno a causa del intento de oficializar el establecimiento de esta mesa. Hoy por hoy, el gobierno dice expresamente que "no existe". Sólo habrían 17 mesas y punto. La posición oficialista ha planteado que no rehúye ningún tema, pero que deben debatirse en el marco de la amplia estructura establecida. En la llamada "Mesa 18" se proyecta debatir sobre problemas nacionales e internacionales. Uno de ellos es el impacto de una represa en el río Madeira, que afectaría la Amazonía boliviana, peruana y brasilera. Otro asunto, el proyecto IIRSA, que contempla la construcción de carreteras bi-oceánicas afectando áreas ecológicamente sensibles. El proyecto de minería en el cerro Mutún que pondría en peligro importantes acuíferos, también esta considerado. La mina de San Cristóbal que estaría utilizando el agua que necesitan los pobladores y dejando desértica una importante zona de producción de quinua, es otro episodio. Se trata en definitiva de un espacio más, que pretende articularse en torno a conflictos socio-ambientales que no han podido ser incluidos en las mesas de trabajo "existentes". El éxito del evento para el Gobierno Boliviano, consistiría en logar que se pase la voz a los pueblos, para que se pronuncien y logar generar un acuerdo a la altura de la humanidad. Tratar de generar una corriente de opinión publica que mueva fuerzas sociales y presione a sus gobiernos con respecto al clima. Dedicado a este aspecto, hay un grupo de trabajo denominado "Estrategias de Acción". Se planeta que se hagan referéndums simultáneos en varios países o la edición de libros dedicados al tema y su concientización. Que se organicen marchas mundiales o la creación de una alianza social internacional. Se trata de forjar la capacidad de movilización a futuro. Abrir espacios en cada país para que vayan legitimando una posición e instrumentos de presión respecto al Clima. Otra posición con respecto al éxito del la Conferencia sugiere que la verdadera conquista es lograr soluciones concretas a problemas puntuales, en todo el globo. Además, velar primero por nuestras necesidades básicas e inmediatas y aportar a la reconducción del "proceso de cambio" en Bolivia. Algo nuevo sería una declaración por parte de los participantes de la Conferencia y la misma Asamblea Legislativa Plurinacional, con una posición oficial respecto a la polémica climática. Reconocer a factores naturales y antrópicos con incidencia en el Clima. Vivimos un breve período de calentamiento - agudizado por factores antrópicos - que precede a un enfriamiento abrupto, propio de una nueva Edad de hielos y diluvios. Tomar en serio lo que estudios de paleo-climatología sostienen: Vamos de Glaciación en Glaciación. 2. Gaia: Comunicación y Política En estas épocas es realmente es innovador en materia legislativa y filosófica plantearnos tan abierta y mediáticamente, unos "derechos de la Tierra". Sugerir que el planeta es sujeto conciente de derecho. Entonces ¿puede Gaia comunicarse? Respondemos a ello rescatando fragmentos de una prosa propia de nuestro artículo "Sangre de selva al borde del camino" (Bolpress). En ellas se comentan dos casos de "comunicación" entre pueblos indígenas y la Madre Tierra: El primer caso se dio en San Ignacio, con la elección de Sixto Vejarano como alcalde: "... En Moxos, también hay creencias antiguas que a su manera, cambian el rumbo de los acontecimientos. Tal es el caso de las consultas hechas al Maíz y al Plátano. Aquel fin de año de 2005, en un par de comunidades mojeñas, portadoras de este saber preguntaron a estas plantas quien ganaría la contienda municipal. Su respuesta circuló rápidamente por los aires comunales y hay quien afirma, que hubieron aquéllos que creyeron seguir un consejo de la Tierra misma, al ir a votar. Quizás habría que volver a consultar a estas plantas sobre inminentes impactos socio-ambientales. Quizás las Madre Tierra si nos pueda dar un mensaje. Quizás..." El otro caso corresponde a Rosalba Jiménez: "... Para concluir esta breve reflexión sobre la cuestión del proceso de consulta, cabe contar parte del relato de una dirigente indígena Sikuane, Májanu - Abuela de Clan de las Guacamayas. Explicó como una parte del pueblo U´wa (Colombia), al ver a sus hermanos del territorio vecino eran impactados (volvía a empezar el exterminio) por operaciones petroleras, decidieron prepararse para el momento en que a ellos les toque enfrentar ese tipo de invasión. Los sabios de su pueblo "visionaron el futuro" y entendieron que como pueblo, debían sumar a su fuerza espiritual, estrategias políticas y jurídicas, debían de aprender el idioma del opresor y defenderse. Crearon sus llamados Planes de Vida y erigieron centros de formación propios en antiguos lugares sagrados, y esperaron, esperaron. Poco después de una década, llegaría la hora. Serían esta vez, los jóvenes, los principales impulsores de la defensa del territorio. Los U´wa utilizando sus conocimientos ancestrales, indujeron el pensamiento de los consultores, cambiaron el lenguaje de los talleres de consulta, dilataron el proceso y finalmente detuvieron el avance petrolero...". La película AVATAR con su árbol de la vida, cuyas raíces nos hacen escuchar a los ancestros, nos recuerda a los relatos de indígenas moxeños. Se cuenta que en alguna de lomas - antrópicas - dispersas por la pampa beniana, a cierta hora y fecha, se puede escuchar a los antiguos. En estos términos tan rústicos, Gaia o la Pachamama que decimos, se comunica y guarda información. Alguna corriente de pensamiento ha propuesta la figura del "Registro Akásico". Una suerte de gran memoria colectiva de todos los tiempos y todos los seres. Un registro universal que "graba" lo vivido y del que de alguna manera podemos "descargar información" o "visionar". El caso de Gregorio Mirabal, indígena curripaco venezolano es paradigmático en este sentido. Siendo dirigente de ORPIA tuvo ocasión de luchar contra la bio-piratería en sus territorios. Expuso con denuncias como instituciones con supuestas investigaciones científicas hacían bio-prospecciones vía conocimientos ancestrales con los nativos del lugar. Se accedía a recursos genéticos estratégicos sencillamente preguntando a los lugareños y sacando muestras. En defensa de sus conocimientos y recursos las comunidades decidieron cerrar el acceso sus territorios, lo que trajo consecuencias. Fueron convocados por el gobierno, instituciones académicas y una organización de propiedad intelectual en Ginebra a dar explicaciones sobre las razones para oponer resistencia a sus proyectos de investigación. Para salir a defender a los ancianos y el territorio, fue elegido Gregorio. Entonces decidió acudir a quienes debía defender, los sabios de su pueblo. Ellos lo llevarían a un viaje de conocimientos, capaz de prepararlo para el reto que tenían por delante. Así, se dirigieron a un lugar lejano en la selva profunda, del que el iniciado nada sabía. Allí, en un ritual de tres días, con agua y sus plantas, los ancianos manejarían su mente, llevándolo a conocer la historia de su pueblo, las antiguas y secretas luchas. Como resultado, salió fortalecido y jamás traicionaría a su gente. En definitiva, la victoria asomó en esta batalla. Los detractores - autoridades y académicos - hubieron de asumir el derecho de los pueblos indígenas a protegerse, hubieron de aceptar las demandas y determinaciones planteadas por éstos. Resultaría que la Pachamama es una consumada política comunista anti-imperialista. 3. Derechos de la Pachamama, primeros calvarios En el Materialismo Histórico se sostiene que en la vida de la sociedad, la política precede al derecho, lo sobre-determina, y a estos dos últimos, los determina la región económica. Actualmente asistimos a un emprendimiento político que sobrepasa al positivismo y su necesidad de materia medible. El concepto de "Derechos de la Madre Tierra" empieza ser parte de discursos y jurisprudencia. Aparece en las noticias, alguna Constitución Política, eventos internacionales, conversaciones diarias y triviales o bien cánticos rituales. Esta noción se va instalando poco a poco en la ideología de las clases sociales. Si prospera el reconocer a la tierra como sujeto de derecho, esto tendrá - casi forzosamente - connotaciones propias de la Ley en el Estado, es decir, capacidad de juzgar y ejecutar el veredicto con la coerción de la fuerza pública. El año 2009, la representación boliviana propuso en la Asamblea General de las Naciones Unidas elaborar una Declaración Universal de los Derechos de la Madre Tierra. Planteó que se reconozca el derecho a la vida, el derecho de regeneración de su bio-capacidad, el derecho a vivir libre de contaminación y el derecho a vivir en armonía. La agroindustria sería unos de los frentes en que medidas políticas a favor de la Pacha afectarían la estructura de la matriz de acumulación capitalista boliviana. Ya se han perfilado criterios durante la pre-cumbre climática de los pueblos. El Grupo de Trabajo 17 "Agricultura y Soberanía Alimentaria", planteaba cuestiones como: Declarar y denunciar que el agro-negocio y su lógica de producción de alimentos para el mercado y no así para el derecho a la alimentación, haciendo perder a la Madre Tierra su capacidad productiva frente a la erosión y la destrucción de la diversidad biológica; Prohibir las tecnologías como los agro-combustibles, los Organismos Genéticamente Modificados, la nanotecnología y todas aquellas que bajo el supuesto de ayudar al clima, en realidad atentan contra la soberanía alimentaria. Promover políticas de control estatales sobre los sistemas de producción agropecuaria para evitar el daño a la madre tierra. Exigir que los gobiernos se comprometan en la defensa del modelo de producción agrícola ecológica. Si se aceptan estos postulados y obrásemos según predicamos, en Bolivia habría que intentar erradicar a varias fracciones burguesas. En tierras bajas a todo el entramado agroindustrial y en tierras altas a los complejos mineros. Afectaríamos ambas "oligarquías". Además, cerrar capítulo con la burguesía monopólica transnacional y sus intereses energéticos. Propiedad colectiva de los medios de producción, control obrero en las fábricas y autogestión a todo nivel, sería acciones para implementar estas políticas climáticas Posibilidades desde luego difíciles y ambiciosas. Sin embargo, son ideas de carácter revolucionario, aunque sin incidencia en los ciclos climáticos milenarios que vive el planeta. No son ideas malas, por el contrario, devienen de demandas unas más vieja que otras, y su implementación mejoraría la vida en el planeta. Su problema reside en el sesgo ideológico. El ignorar que este nuevo sujeto del derecho, la madre tierra, es un ser de carácter glacial que tiende al frío y la lluvia. Sufre las poderosas y enérgicas influencias de su compañero Solar. Mientras se siga construyendo un entramado de criterios y noticias, de leyes y políticas, basados en la falsedad ideológica del indefinido calentamiento global debido a causas antrópicas, seguiremos errando el camino en el reconocimiento de la verdadera naturaleza de aquel ser a quien le pretendemos otorgar derechos. Nuestra madre tierra esta pariendo una Glaciación. Quizás debamos considerar que es un ser de partos permanentes. Deberíamos tratarla como a mujer preñada: caprichosa y vulnerable. Construir sus derechos sobre la premisa de que esta en el grupo de seres más vulnerables y necesita un cuidado constante. 4. Clima, Tiempo Meteorológico y Corrientes Oceánicas Antes de seguir, unas breves consideraciones que distinguen al tiempo del clima. El tiempo meteorológico observa y mide las variables atmosféricas de un determinado lugar, en un momento dado. El clima indica los datos de esas mismas variables en el mismo lugar, pero en un periodo más largo, 30 años en adelante. Para estudiar el clima vemos los elementos del tiempo: la temperatura, la humedad, la presión, los vientos y precipitaciones. Factores que influyen sobre estos elementos pueden ser: la latitud geográfica, la altitud del lugar, las corrientes oceánicas, entre otras. De los cinco elementos del Tiempo, la temperatura y las precipitaciones son determinantes. La mayor o menor temperatura da origen a una menor o mayor presión atmosférica , pues el aire caliente tiene menor densidad y se eleva, mientras que el aire frío tiene mayor densidad y desciende. Esto provoca diferencias de presión que originan a los vientos. Esos acarrean humedad y nubes, ocasionando las lluvias sobre la superficie terrestre. Veamos un poco en detalle uno de los factores que influyen en las variables del clima de la Pachamama: las corrientes oceánicas. Asunto que tampoco esta fuera de la polémica, ya que hay diferencias en cuanto a la interpretación de sus movimientos. La corriente oceánica del Golfo fue descubierta por habitantes ibéricos hacia 1513. En adelante fue utilizada por las embarcaciones de Castilla en sus viajes de vuelta desde el Caribe hacia España. Esta corriente oceánica mueve una enorme masa de agua cálida desde regiones tropicales hacia las polares, desde el golfo de México hacia el Atlántico Norte. Con una profundidad de unos 100 m y más de 1000 km de ancho se desplaza aproximadamente a 1,8 m/s con un caudal de 80 millones de m³/s. Su circulación asegura a Europa un clima cálido y palía la aridez en México y las Antillas. Su paso influye en la flora y la fauna marina. Es provocada por la acción combinada del movimiento de rotación del planeta, los vientos globales, la alta concentración sal de sus aguas y de la baja temperatura de la misma cuando llega a latitudes polares. Esto último se denomina circulación termohalina. Las masas enfriadas, más densas, se trasladan por gravedad hacia el fondo marítimo. Un incremento en el flujo de agua dulce en la superficie del Atlántico Norte, puede llevar a una reducción en la circulación termohalina En la sección de "Documentos para la próxima glaciación" del sitio www.documaniatv.com, puede encontrarse un documento que sostiene: "El calentamiento del planeta provoca el deshielo del Círculo Polar Ártico, el crecimiento del caudal de los ríos de Norteamérica y Asia y el aumento de las lluvias en el Ártico, lo que se traduce en un incremento del agua dulce que se vierte en los océanos alterando su salinidad y densidad. Este cambio provocaría la paralización de la corriente del Golfo. La interrupción de esta benefactora circulación se produciría, según estas previsiones, a lo largo de este siglo con unas consecuencias dramáticas: sin los efectos térmicos de la corriente del Golfo, en Europa se alcanzarían temperaturas similares a las de Siberia, lo que supondría la escasez de recursos hídricos y la aparición de tormentas de nieve y vientos cada vez más frecuentes." Hay quienes acusan de alarmistas del Escándalo Climático, el "Climagate" a los que niegan el cambio climático global antrópico y afirman que estamos ante una próxima Edad de Hielo. Una noticia de Richard Black (BBC) dice: "La Corriente del Golfo no parece estar desacelerándose, afirmaron científicos estadounidenses que utilizaron satélites para monitorear los cambios en el mar. En concordancia con los resultados obtenidos por otros expertos que utilizaron distintas metodologías, el equipo estadounidense descubrió variaciones dramáticas en el corto plazo, pero esto no significa que se trate de una tendencia..." (www.atl.org.mx). Incluso Greenpeace ha denunciado que petroleras subsidian corrientes de pensamiento que niegan el calentamiento antrópico del clima en la Tierra. En el sitio web www.burbuja.info se encuentra el escrito "Corriente del golfo y mini edad de hielo", allí leemos que: "varios estudios paleo-climatológicos de los últimos años han demostrado que las pasadas atenuaciones de la corriente del Golfo, guardan una excelente correlación con las glaciaciones y otros periodos de enfriamiento en Europa. El último bajón de la corriente, por ejemplo, coincide con la "pequeña edad de hielo", el moderado enfriamiento (de 1 grado de promedio) que experimentó el continente entre los siglos XVI y XIX. La Pequeña Edad de Hielo fue un período frío que abarcó desde comienzos del siglo XIV hasta mediados del XIX. Puso fin a una era extraordinariamente calurosa llamada Óptimo climático medieval. Hubo tres máximos: sobre 1650, alrededor de 1770 y hacia 1850". Según estos datos, resulta que los bravos y salvajes conquistadores del viejo mundo llegaron enfermos de frío y hambrientos a las costas marítimas de la Abya Yala. Sus pestes provocarían entre los gentiles del continente el mayor colapso demográfico conocido. 5. Ciclos solares y clima terrestre Vemos con algo de detenimiento a otros de los factores que hacen variar el clima. Un asunto que no hemos visto considerado en la Conferencia Mundial del Clima en Tiquipaya. Es otro tema en discusión, si hay una relación casual o causal entre el astro rey y el clima frío en la tierra. El Sol tiene ciclos propios en lo que se calienta o enfría. Estos se aprecian por enormes erupciones conocidas como manchas solares. A mayor cantidad de manchas más calor hacia la tierra. Son enormes explosiones con la fuerza de miles de bombas atómicas, que despliegan mareas de radiación hacia la tierra, llegando a afectar las transmisiones de radio. Se conocen períodos con escasa manchas del Sol: el Mínimo de Maunder (1645 - 1715), el Mínimo de Spörer (1420 - 1570) y el Mínimo de Dalton (1795 - 1823). El mínimo de Maunder (llamado así en honor del astrónomo solar E.W. Maunder quién descubrió las ausencias de manchas solares) es el nombre dado al período de mediados del siglo XVII a principios del siglo XVIII. Se observó en la época cerca de 50 manchas solares, mientras que lo típico sería observar entre unas 40.000 y 50.000 manchas. Durante este período se vivió en lo que hoy es Europa y Norte América un pico de frío con inviernos extremadamente fríos. Era lo propio de la llamada Pequeña Edad de Hielo, acaecida entre los siglos XV al XVII. Desde la mitad del siglo XIV hasta principios del XIX se dá en la tierra un período llamado Pequeña Era Glacial. Las condiciones del clima fuero durísimas. La temperatura global bajó entre 1 y 1.5º C respecto a las actuales. Esta era comprende los mínimos de Spörer, Maunder y Dalton. (Wikipedia.es) Registros dan cuenta que en el año 1340 los vikingos modificaron la ruta comercial usual entre Islandia y Groenlandia a causa del el avance del hielo polar. Hacía 1347 la abandonaron del todo por que la navegación era imposible. En el invierno de 1422 a 1423, el hielo cubrió por completo la superficie del mar Báltico. Entre 1570 y 1574, los inviernos fueron muy fríos en Europa y los veranos casi inexistentes y lluviosos. El Ebro se congeló a su paso por Tortosa el 12 de diciembre de 1507 y este suceso se repitió en 1617 y hasta siete veces en los años siguientes. Durante el Mínimo de Maunder aumentaron los glaciares en el norte de Europa así como el largo de sus inviernos. El río Támesis estuvo helado durante semanas en el invierno de 1694-95 (www.ite.educacion.es) Actualmente se cree que el Sol está atravesando el más profundo mínimo solar en casi todo un siglo. Transcurren semanas y, algunas veces, hasta meses sin que haya una pequeña mancha solar. Esta quietud se ha prolongado por más de dos años. El investigador Bill Livingston, ha estado midiendo los campos magnéticos de las manchas solares durante los últimos 17 años. Ha descubierto que la actividad magnética de las manchas solares va decreciendo. Si extrapolamos esta tendencia hacia el futuro, las manchas solares podrían desaparecer completamente cerca del año 2015. (unknown2012.wordpress.com) Para el astrónomo británico David Whitehouse, la falta de manchas en nuestro Sol, podría presagiar otra mini edad de hielo (xochipilli.wordpress.com). 6. Impactos micro-climáticos antrópicos: Ciudades Mucho se comenta sobre la incidencia de la actividad humana sobre el clima. Pensamos que es un fenómeno muy local, que agudiza las variaciones del tiempo meteorológico y crea la ilusión de una transformación global. Existe una variabilidad natural del clima y por otro lado un cambio climático antropogénico. Este último se manifiesta con claridad en las ciudades. Las grandes urbes producen microclimas, esto es "un lugar de características distintas a las que están en la misma zona en que se encuentra". Sus factores pueden ser la topografía, temperatura, humedad, altitud, latitud, insolación o bien la cobertura vegetal. El clima urbano se atribuye al hecho que la urbanización hace cambios irreversibles en el paisaje previo y provoca cambios en la atmósfera colindante. Las praderas, bosques, campos, se convierten en superficies de piedra, hormigón, asfalto, metal, ladrillos. Esto afecta al balance del calor y del agua, provocando cambios en las temperaturas atmosféricas, lluvias y nubosidad. El "Efecto de Isla de Calor Urbano" es causado por que el concreto, asfalto de caminos y edificios que tienden a calentarse durante el día y liberar calor en la noche, resultando en mayores temperaturas diurnas y nocturnas. Sin embargo, los científicos no creen que las grandes ciudades provoquen grandes perturbaciones al clima mundial. Se cree que la aportación del efecto de isla de calor urbano al aumento de 0.4 a 0.8ºC en la temperatura global del último siglo, no es mayor de 0.05ºC (www.atmosphere.mpg.de). 7. Apertura del telón al nuevo escenario climático Esperamos en Bolivia la presencia de científicos que expongan estudios sobre los factores que afectan al clima. Que nos ilustren sobre el mar que no tenemos, las aguas saladas que no nos llegan, vientos marítimos que nuestros barcos no conocen. Queremos que de la Conferencia en Tiquipaya salga un consenso sobre bases científicas antes que ideológicas. Que salgan decisiones preclaras y no discursos demagógicos para un show mediático. Sobre todo, que se reconozca al nuevo escenario climático en el que todos estamos inmersos, un ciclo de glaciaciones. Esto daría una nueva orientación a la política correspondiente. En cualquier época, energía, alimentos y clima habrían que ser los factores determinantes a considerar en la acción política inmediata. Estamos frente a la crisis climática, una crisis de ecosistemas deteriorados con microclimas alterados y una crisis social ante alteraciones del tiempo meteorológico. La Pachamama en latitudes bolivianas, tiene mucho que ofrecer para la sobrevivencia humana durante el Tiempo de Hielo al Norte y el Tiempo de Aguas al Sur del Planeta. * Licenciado en Relaciones Internacionales - emirartin@gmail.com

¿Cuál el papel de los conocimientos de las naciones indígenas en el sistema educativo?

Crítica al fundamento epistemológico de la nueva Ley educativa “Siñani-Pérez” Vladimir Mendoza M. * Las prácticas sociales de las naciones indígenas se manifiestan en la producción de tecnología y técnicas relacionadas a la producción que bien pueden considerarse aportes a la ciencia. Todas las naciones y culturas han tenido y tienen todavía conocimientos que les permiten existir y reproducirse. Las funciones sociales que despliegan –producción de bienes materiales, producción de símbolos y representaciones culturales, etc.– son posibles gracias al conocimiento que han desarrollado. En el programa del POR se consigna dos respuestas fundamentales respecto al movimiento indígena – campesino. La primera está asentada en la peculiar problemática económico – estructural de los explotados del agro y se refiere a la cuestión de la tierra. Las consignas de ocupación de la tierra, destrucción de latifundio, colectivización de las grandes propiedades y cooperativización de los minifundios condensan en lo esencial esta primera respuesta. La segunda tiene que ver con la dimensión nacional y étnica del movimiento indígena y se plantea como la posibilidad de que los pueblos indígenas soliciten su autodeterminación plena o su federación al futuro Estado obrero que surgirá de la revolución encabezada por la clase obrera y será protagonizada por toda la nación oprimida. Sobre esta plataforma programática, debemos construir una respuesta concreta respecto a cuál es nuestra posición sobre la relación entre el sistema educativo que propugnamos y los conocimientos ancestrales de las naciones indígenas. ¿De qué concepción del conocimiento debemos partir? Una correcta valoración de los conocimientos ancestrales de las naciones indígenas debe partir de la concepción misma que tenemos sobre el conocimiento. Se trata, en gran parte, de un debate epistemológico. Desde el punto de vista dialéctico, el conocimiento es un proceso continuo provocado por la relación entre el ser humano, como sujeto histórico y social, y la realidad objetiva que se encuentra en permanente cambio y modificación. La interrelación aquí dada entre el sujeto y el objeto es prácticamente inseparable, aunque por razones teóricas debamos abstraer cada uno de los elementos. Para satisfacer sus múltiples necesidades naturales y sociales, el sujeto debe transformar la realidad (objeto) con el fin de producir, a través del trabajo social, todos los bienes que precisa. En este proceso de transformación de la realidad, el sujeto no sólo que la modifica con su acción práctica, como diría Marx “humanizando” la naturaleza, sino que es también modificado por ella. Se da entonces un proceso de interrelación dialéctica de acción y reacción entre el sujeto histórico – social y el objeto dinámico y cambiante. Al tiempo que el hombre social transforma la naturaleza aprovechando los productos de su trabajo, es transformado por ella. Pero las prácticas histórico – sociales de los seres humanos no son suficientes para producir conocimientos exactos y verídicos, es decir científicos. Para llegar a esta altura, los conocimientos del sujeto tienen que pasar por una elaboración teórica, un proceso de creación de conceptos, que en una primera instancia se presenta como un proceso de abstracción. La profundidad con la que se construye abstracciones determina la posibilidad del surgimiento de conceptos concretos, es decir, de conceptos que son la suma e interconexión de distintas abstracciones, una suma que provoca conceptos más precisos sobre la realidad objetiva. Una buena medida de la exactitud y profundidad de nuestros conocimientos es la capacidad de los conceptos de reflejar lo más fielmente posible la realidad objetiva a partir de la concreción. Está demás decir que este proceso cognitivo incluye varios niveles acordes a la profundidad de los conocimientos elaborados por el ser humano. Esto quiere decir que la práctica social de una cultura no significa necesariamente la posibilidad de que ésta realice o posea ciencia. La técnica desarrollada por algunas culturas ancestrales de nuestro continente es un buen ejemplo. Por otro lado, cuando hablamos del proceso de conocimiento humano, estamos englobando a toda la especie y no sólo a algunas culturas. Como dice Nelson Reascos (curso de epistemología, Pag. 1), todas las naciones y culturas han tenido y tienen todavía conocimientos que les permiten existir y reproducirse. Las funciones sociales que despliegan –producción de bienes materiales, producción de símbolos y representaciones culturales, etc. – son posibles gracias al conocimiento que han desarrollado. Desde esta óptica, todos los conocimientos son útiles, válidos y necesarios, y algunas veces son también verdaderos, puesto que están relacionados a necesidades vitales ya sean naturales o sociales, todo esto en un contexto histórico determinado. De aquí extraemos una conclusión: no existe ninguna sociedad ignorante. Construir viviendas, producir vestimentas, adecuar el contexto geográfico a las necesidades humanas, modificar la naturaleza para aprovechar sus frutos, adaptarse al clima, etc., etc., supone conocer el funcionamiento de las leyes de la naturaleza y de la realidad en su conjunto. Para los marxistas, por tanto, el conocimiento está indisolublemente ligado a la vida cotidiana a través del trabajo. ¿Cuáles son las características generales del conocimiento social en la sociedad boliviana? Bolivia posee una sociedad en la que coexisten diversas formas de producción, donde cada una de ellas se ha desarrollado de manera desigual, es decir que algunas poseen mayor capacidad productiva (desarrollo material) que otras; esto se constata al comparar las fuerzas productivas de una comunidad aymara con las de una comunidad ayorea, y también si observamos ambas en relación a la gran producción capitalista asentada en la explotación de hidrocarburos. Esta particular estructura económica del país ofrece también una superestructura variada y combinada, donde los productos culturales se mezclan e hibridan, tal como lo hacen sus respectivas bases materiales. En muchas ciudades, por ejemplo, se puede constatar la práctica simbólica la k’oa mezclada con intereses relacionados a la visión capitalista del lucro, tal el caso de la práctica de esta tradición en centros comerciales de grandes ciudades como La Paz y Cochabamba. Al mismo tiempo, las prácticas sociales de las naciones indígenas que han permanecido hasta ahora se manifiestan en la producción de técnicas y tecnología relacionadas a la producción que bien pueden considerarse avances aprovechables por la ciencia. Pero, sin duda, podemos hablar que la última palabra de la técnica, tecnología y de la ciencia ha llegado de la mano de la inversión de capital financiero extranjero sobre nuestros recursos naturales, donde las grandes transnacionales invierten en poderosas máquinas y ponen en práctica avanzados conocimientos científicos con el fin de posibilitarse jugosas ganancias a costa del saqueo de los recursos naturales del país. ¿Cuál es el enfoque de la nueva Ley educativa respecto a los conocimientos ancestrales? El fundamento epistemológico de la nueva Ley educativa mantiene dos aspectos centrales respecto a los conocimientos ancestrales de los pueblos y naciones indígenas: En primer lugar, asume como concepción el relativismo gnoseológico. Una de las consecuencias del auge del posmodernismo en las ciencias sociales y humanas fue que invirtió el etnocentrismo cultural propio de muchas teorías “occidentales” en su contrario; en un relativismo cultural y gnoseológico donde se termina cuestionando la validez no de elementos ideológicos de la ciencia, los cuales ciertamente existen, sino de la capacidad científica de develar la objetividad de las leyes de desarrollo natural y social. El relativismo posmoderno comete el grueso error de equiparar en un mismo nivel de validez y certeza todos los conocimientos de la humanidad, al margen de su influencia y relación con el desarrollo de las fuerzas productivas en cada cultura. Parte de la premisa de que todas las culturas son únicas e inconmensurables. La conclusión es que sólo un dogmático positivismo puede comparar los productos de cada cultura. Hasta cierto punto, esta idea sirvió como un arma de las ciencias sociales progresistas para cuestionar las posiciones evolucionistas y lineales que sirvieron de soporte “científico” a teorías reaccionarias y racistas como el darwinismo social. Sin embargo convertidas en relativismo, sirven para justificar ideas irracionalistas nada útiles para la lucha del movimiento indígena y campesino. La universalidad de la ciencia no está vinculada a la hegemonía ideológica del eurocentrismo (aunque a veces fue desfigurada en ese sentido), sino a la capacidad de descubrir leyes objetivas, es decir independientes de la conciencia de los individuos. Los descubrimientos y avances científicos particulares, desarrollados por las distintas culturas, no son desarrollados entre cuatro paredes de una civilización, sino en inter-relación histórica entre ellas, ni tampoco tienen porqué ser opuestos y contrarios a las leyes, regularidades y teorías que hasta determinado punto han desarrollado otras culturas. Se debe entender la ciencia universal como el sistema de conocimientos más acertados y concretos sobre la realidad natural y social, pero nunca como algo cerrado y terminado. Para el relativismo posmoderno, tan presente en la Ley “Siñani-Pérez”, lo único que existe cuando hablamos de epistemología es una serie de particulares saberes y conocimientos pertenecientes a las distintas culturas, cada uno de los cuales en el mismo nivel de validez, y por tanto de verdad, que todos los demás. Desde este punto de vista, la universalidad no es más que una pretensión abusiva de la ciencia occidental que impuso a través de la colonización sus propios conocimientos al resto de las culturas. Ya hemos dicho que, desde el punto de vista dialéctico, la ciencia nunca es pura e incontaminada de posiciones e intereses de clase. Sin embargo, en un debate epistemológico hay que poner cada cosa en su lugar. No se puede reducir el desarrollo de la ciencia a los intereses de las clases dominantes, ni la veracidad de las leyes científicas a simples maniobras ideológicas de la colonización. El carácter universal de la ciencia es una cuestión absolutamente concreta, contiene en sí toda la riqueza de los desarrollos y avances particulares de las sociedades y culturas, elevándolos a niveles de generalización que les permite tener, precisamente, la categoría de ciencia. Contrariamente a lo que sostiene la nueva Ley educativa, no existe una matemática occidental, otra tihuanacota y otra maya. Existen peculiares desarrollos históricos de cada una de esas civilizaciones que han producido conocimientos concretos, y que, en la medida de su veracidad, constatada en la práctica social, son aportes a la ciencia, cada uno en distintos niveles de profundidad y exactitud. En segundo lugar, la Ley “Siñani-Pérez” propone “rescatar” y “valorizar” los saberes y conocimientos ancestrales de las naciones indígenas incorporándolos al currículo con el fin de establecer un diálogo simétrico con la “ciencia universal”. Ya hemos sostenido la equivocación de separar lo particular de la universal, como dos realidades paralelas e independientes donde no hay una mutua influencia y relación entre ambos. Por otro lado, también ya dijimos que las prácticas sociales de las culturas, aunque todas tienen distinto tipo de utilidad, no todas son necesariamente verdaderas. Aquellos conocimientos vinculados lo más directamente posible a la producción material de bienes útiles son los que generalmente se desarrollan con más rigurosidad y certeza. La sociedad necesita exigir mayor exactitud a aquellos conocimientos que permiten su reproducción social. Una sociedad que no produce no sobrevive. Cada sociedad, para producir, está obligada a modificar y superar sus formas de producción en función de nuevas y emergentes necesidades que surgen como producto de la dinámica del trabajo social. El grotesco error del currículo educativo gubernamental es que introduce elementos de la cosmovisión, saberes y conocimientos ancestrales como si todos tuvieran su misma validez y pertinencia científica. Para los teóricos indigenistas, tanto ciertas prácticas simbólicas (ritos, mitos, tradiciones, etc.), como verdaderos aportes con validez científica como los pisos ecológicos, son igualmente oportunos para enseñarse por todas las disciplinas científicas. Cometen este error porque son consecuentes con su concepción romántica sobre los pueblos indígenas, puesto que no ven en ellos más que sociedades idílicas. Para nosotros, en cambio, las sociedades indígenas, al igual que todas las culturas humanas hasta ahora, han sido también generadoras de visiones fantásticas y mágicas de la realidad, las cuales generalmente son un obstáculo del conocimiento científico. El capitalismo no deja de asombrar con los desarrollos de la tecnología, pero al mismo tiempo, es una sociedad incapaz de librarse de los prejuicios religiosos y místicos, debido a la utilidad social que éstos tienen para una civilización sostenida en la explotación y que actualmente está en franco proceso de degradación integral, lo que agudiza aun más la irracionalidad humana. Es una reivindicación básica que el sistema educativo tienda a la formación científica de los educandos. Hay que impedir que conviertan a la escuela en una caja de resonancia de los prejuicios y visiones mágicas de la realidad. Esto no significa desconocer las prácticas simbólicas de los pueblos indígenas. Nuestro compromiso con la herencia cultural nos obliga a conocer éstos pero no para impartirlos como si se tratasen de contenidos religiosos, tal cual pretende la Ley educativa del MAS, sino como parte del estudio crítico que realicen maestros y estudiantes. * Profesor y dirigente de la Federación de Maestros Urbanos de Cochabamba.

“Errores convenientes” en YPFB Corporación

Los informes técnicos de YPFB anualmente registran la denominación de los pozos, el contrato al cual corresponden, la empresa operadora, la profundidad programada y alcanzada, el departamento en el que están ubicados y, lo más relevante para el asunto que abordamos aquí, el número de pozos en perforación y el número de pozos terminados. Lo que cuenta como indicador de la exploración y explotación petrolera son los pozos terminados y no los pozos en perforación; simplemente porque los primeros permiten comparar el desempeño, de una empresa o de la industria en un país, por gestión o periodo; en cambio los pozos en perforación no sirven para evaluar dicho desempeño, porque las operaciones programadas para tal fin pueden abarcar más de dos o tres gestiones, pueden ser detenidas y/o suspendidas o, incluso, quedar abandonadas y dejar el pozo sin conclusión. Sin embargo de esta forma, internacionalmente aceptada, de contabilizar los pozos efectivamente perforados y concluidos, los personeros de YPFB consignaron, en sus publicaciones no técnicas y en la información transferida al presidente, la suma de pozos terminados y pozos en perforación en cada gestión, consiguiendo así un resultado más alto, pero erróneo respecto de la exploración y explotación hidrocarburífera en Bolivia. En los 6 años de gobierno del MAS se perforaron 16 pozos exploratorios y 49 de desarrollo, haciendo un total de 65 y no 94 como informó el Presidente Gustavo Rodríguez Cáceres * El 22 de enero pasado, el presidente Evo Morales, lamentando que la situación de la industria petrolera boliviana no era “como (él) desearía” y aclarando que no tenía “porqué falsear la verdad”, informaba que entre los años 2000 – 2005 las transnacionales petroleras habían perforado 213 pozos y entre los años 2006 – 2011, ya con la nacionalización en marcha y YPFB refundada, se habían perforado “apenas” 94 pozos. Lamentablemente, la información presentada por el presidente, a pesar de su reparo, es completamente errada El extremo de este error está en que los pozos, cuyas operaciones iniciaban al final de un año y concluían al principio del otro, o aquellos cuya programación implicaba más de una gestión, fueron contabilizados más de una vez. Por ejemplo, la perforación del pozo Itaú X-2 inició el 23 de marzo de 2000 y concluyó el 6 de junio de 2002, por ello en los informes de 2000 y 2001 figuró como pozo en perforación y en los informes de 2002, como pozo terminado. Evidentemente, aunque haya diferentes registros, se trata de un mismo y único pozo; sin embargo, de acuerdo con el peculiar método de los personeros de YPFB, el Itaú X-2 equivaldría a tres pozos diferentes. Si contabilizamos sólo los pozos terminados, la cruda realidad es que en los seis años anteriores al actual periodo gubernamental se perforaron sólo 70 pozos exploratorios y 88 pozos de desarrollo, haciendo un total de 158 y no 213; y en los seis años que lleva el actual gobierno se perforaron apenas 16 pozos exploratorios y 49 pozos de desarrollo, haciendo un total de 65 pozos y no 94. ¿Por qué los personeros de YPFB Corporación divulgan datos erróneos? Más que ineptitud, es el apremio por mostrar resultados positivos de una nacionalización que no es tal, lo que los compele a cometer (digámoslo eufemísticamente) “errores convenientes” para su imagen. El asunto planteado aquí no es trivial, y no se refiere a la validez y utilidad general de los datos estadísticos, sino al hecho de que su adecuada administración y difusión, con seguridad, haría surgir interrogantes incomodas para los actuales ejecutivos de YPFB. Por ejemplo: ¿Por qué la intitulada YPFB Corporación no logra superar el desempeño habido durante la época de la capitalización? O peor, ¿por qué no logra alcanzar los estándares de la antigua YPFB, que entre 1990 – 1995, periodo de años similar al que compara el presidente, logró perforar en total 168 pozos, 48 de exploración y 120 de explotación? * El autor es economista.

Más de 783 millones de personas sin agua potable y 2.500 millones sin servicios sanitarios ¿Agua para la vida o para la mina?

Los gastos en sistemas de provisión de agua limpia para los seres humanos son ínfimos en comparación con las multimillonarias inversiones en proyectos de aprovechamiento de agua con fines industriales. Alrededor de 783 millones de personas carecen de agua potable en el mundo y 2.500 millones no acceden a servicios sanitarios, revela el informe Progresos sobre Agua Potable y Sanidad-2012, elaborado por dos agencias de la ONU. El mundo está lejos de cumplir los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) en lo referido a la sanidad pública, y es muy difícil que alcance las metas acordadas en la Cumbre del Milenio de septiembre de 2000, dice el informe elaborado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Fondo de la ONU para la Infancia (Unicef). Las metasODM definen los objetivos mundiales en cuanto a cobertura de servicios de salud, educación, capacidad de la mujer, sostenibilidad ambiental y reducción de la pobreza extrema y el hambre antes de 2015. Uno de los compromisos es que al menos el 75% de la población acceda a servicios básicos de saneamiento, pero a tres años del plazo solo el 63% de la población mundial cuenta con esos servicios, señala el informe de la OMS y Unicef. El documento precisa que 1.100 millones personas, en su mayoría radicadas en zonas rurales, todavía defecan al aire libre: 626 millones en India, 14 millones en China y 7,2 millones en Brasil. El informe destaca que más de dos mil millones de personas lograron acceder a fuentes de agua entre 1990 y 2010, y a finales de 2010 el 89% de la población mundial (6.100 millones de personas) contaba con fuentes mejoradas de agua. De esta manera, se superó la meta establecida en los ODM, y se espera que la cobertura aumente hasta 92% en 2015. A pesar del éxito, la OMS y Unicef llaman la atención sobre las enormes disparidades regionales: Acceden a fuentes de agua potable el 90% o más de los habitantes de América Latina y Asia, pero solo el 61% de la población de África subsahariana. Según un estudio del Programa de Agua y Saneamiento del Banco Mundial (BM), uno de cada cinco latinoamericanos (más o menos 120 millones de personas) no tienen acceso a un servicio básico de saneamiento, y alrededor de 40 millones aún defecan al aire libre. En Centroamérica, varios expertos consideran urgente aumentar las inversiones en sistemas de tratamiento de aguas negras, pues la cobertura del área continúa por debajo del 20%. En Costa Rica, por ejemplo, más de 179 mil personas consumen agua contaminada con materia fecal y otras sustancias, reveló el Laboratorio Nacional de Aguas del Instituto de Acueductos y Alcantarillados (AyA). [1] Nicaragua registra la mayor cobertura en saneamiento de aguas residuales en Centroamérica, con un índice nacional de 49%. La Empresa Nicaragüense de Acueductos y Alcantarillados (Enacal) ejecuta el Programa de Agua y Saneamiento para Managua (Prasma), con un préstamo del Banco Mundial, que incluye 49 sistemas de agua potable, 17.723 nuevas conexiones para agua en 76 kilómetros de tubería, y unas 31.678 conexiones para aguas residuales domésticas en 122 kilómetros de redes. [2] En Bolivia, el programa Mas Inversión para el Agua (MIAGUA) invirtió 104 millones de dólares en más de mil proyectos ejecutados en 330 municipios del país. Con esas obras, en 2011 Bolivia alcanzó el 78,5% de cobertura de agua potable, cumpliendo así una meta de los ODM. La contaminación mata Unicef informó que más de tres mil infantes mueren diariamente en el mundo a causa de enfermedades diarreicas. Según la OMS, el 10% de las enfermedades tiene relación con la mala calidad del agua y los servicios sanitarios. La contaminación del agua potable y las aguas albañales son responsables del 25% de la mortalidad infantil en Asia, reveló la filipina Olivia La’O Castillo, miembro del Consejo Asesor del Secretario General de la ONU, en un simposio internacional del Programa Hidrología para el Ambiente, la Vida y las Políticas 2011 (HELP en inglés), celebrado en noviembre del año pasado en Panamá. [3] Por falta de higiene y saneamiento, América Latina pierde cada año entre 2 y 7% de su Producto Interno Bruto (PIB), calcula el BM. Según ese organismo, la higiene contribuiría a reducir las tasas de diarrea en casi el 40% y en cerca del 23% la incidencia de infecciones respiratorias agudas, y por esa razón tiene comprometidos en proyectos de saneamiento básico más de 20 mil millones de dólares en más de 90 países, incluyendo 2.400 millones de dólares en América Latina durante el último decenio. Sin embargo, los gastos del BM y de otros organismos públicos y privados en sistemas de provisión de agua limpia para seres humanos son ínfimos en comparación con las multimillonarias inversiones en proyectos de aprovechamiento de agua con fines industriales. En la actualidad, la minería metalífera tal vez es el principal factor de reasignación de dotaciones hídricas en todo el planeta. Se caracteriza por ser una actividad fuertemente globalizada, controlada por pocas transnacionales, y por consumir enormes cantidades de agua. [4] Las industrias extractivas de minerales e hidrocarburos están directamente involucradas en la degradación de fuentes de agua y tierras en todo el mundo. El Representante Especial del Secretario General de las Naciones Unidas sobre los Derechos Humanos y Empresas Transnacionales informó que de los 320 casos de violación a los derechos humanos reportados en 2009-2010, el sector más denunciado fue el de las industrias extractivas con un 28% de menciones. [5] En la actualidad no hay país latinoamericano con proyectos de minería a gran escala que no tenga conflictos sociales. Destacan los casos de México, varios países centroamericanos como Guatemala, El Salvador, Honduras, Costa Rica y Panamá; y en Suramérica Ecuador, Perú, Colombia, Brasil, Argentina y Chile. Según el Observatorio de Conflictos Mineros de América Latina (OCMAL) actualmente hay 120 conflictos activos que involucran a más de 150 comunidades afectadas en toda la región. [6] En 2011 se reportaron más de 469 denuncias de daños ambientales en Costa Rica y el Tribunal Ambiental Administrativo (TAA) abrió casi cuatro mil expedientes nuevos en la última década. La mayoría de las causas iniciadas el año pasado fueron por afectaciones a áreas protegidas (159), por tala de árboles (55), daños a humedales (45), y tratamiento deficiente de aguas residuales (38), entre otros conflictos ambientales. En noviembre de 2011, académicos y activistas hondureños lanzaron una denuncia internacional contra la minera canadiense Goldcorp por atentar contra la vida de las poblaciones de los municipios Cedros, San Ignacio y El Porvenir, situados en el valle de Siria, departamento Francisco Morán. Estudios forenses de 2007 demuestran que los habitantes de los tres municipios tienen la sangre contaminada con elevados niveles de cianuro, plomo, mercurio y arsénico. [7] En República Dominicana, la Academia de Ciencias recomendó al Ministerio de Medio Ambiente rechazar el proyecto minero de la transnacional Falcondo Xstrata Níckel en Loma Miranda, provincia de La Vega, que pondría en peligro una cuenca donde se originan ríos y manantiales que suministran agua potable a los valles de Bonao y La Vega. [8] El Primer Encuentro Boliviano en defensa del medio ambiente y la Madre Tierra, celebrado en agosto de 2011 en la localidad de Challapata, expresó su rechazo rotundo a la explotación minera en la cuenca del río Desaguadero y Lagos Uru-Uru y Poopó. Diversos estudios confirmaron que solo en la sub cuenca de Huanuni hay por lo menos 800 familias afectadas por la contaminación, sin contar los hogares de otras sub cuencas como Cañadón Antequera, Poopó y Desaguadero. En 2009 el gobierno de Evo Morales decretó emergencia en Huanuni, Machacamarca, El Choro y Poopó por la “inminente afectación a la salud humana y la seguridad alimentaria ocasionada por la prolongada presencia de contaminación y salinización de suelos”. En Perú se registran importantes conflictos entre empresas mineras y agricultores por el uso del agua; los casos más explosivos son la expansión de la minera Yanacocha, conformada por la estadounidense Newmont y la peruana Buenaventura, y el uso de aguas subterráneas en Piura. El proyecto Conga de Yanacocha pretende secar cuatro lagunas para extraer oro y trasvasar las aguas a reservorios artificiales en el departamento de Cajamarca. Una violenta protesta popular obligó a postergar el inicio de obras. También por la presión popular, desde 2009 están detenidas las operaciones de la compañía Doe Run Perú en Junín, una de las 10 ciudades más contaminadas del mundo. El 9 de febrero de 2012 llegaron a Lima cientos de campesinos, indígenas y activistas sociales para exigir al gobierno de Ollanta Humala que modifique su política minera. La Marcha Nacional del Agua, iniciada en Cajamarca, pidió la anulación del proyecto minero Conga, la declaratoria de intangibilidad de las cabeceras de cuenca y la prohibición del uso del cianuro y el mercurio en actividades mineras. La protesta popular obligó al gobierno a exigir a las empresas medidas de mitigación para contrarrestar la contaminación del medioambiente, y a establecer un nuevo sistema de control de insumos químicos empleados en la actividad minera ilegal. [9] La minería a gran escala también causa serios problemas en América del Norte. Según la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA), la minería contaminó más del 40% de las cuencas hidrográficas en el oeste de ese país. Un reciente informe de la Comisión para la Cooperación Ambiental (CCA) detalla los niveles de contaminación de las cuencas de los ríos Bravo y Columbia, dos importantes sistemas fluviales transfronterizos de América del Norte. El estudio documenta las emisiones y transferencias de 5.700 millones de kilogramos de contaminantes generados por establecimientos que presentan informes a los programas de registro en Canadá, Estados Unidos y México (RETC). [10] En 2006, los establecimientos industriales de América del Norte transfirieron directamente a aguas superficiales más de 228 millones de kilogramos de contaminantes, y al menos 133 millones de kilogramos de contaminantes a sistemas de alcantarillado o de tratamiento de aguas residuales. Tan sólo dos compuestos (nitratos y amoniaco) representaron el 90% del volumen total de las 256 sustancias químicas emitidas a aguas superficiales. En abril de 2011, miles de litros de fluidos tóxicos remanentes de fracturas hidráulicas fueron vertidos en vías fluviales en el condado de Bradford, estado de Pennsylvania, tras la explosión de un pozo de gas natural de la compañía Chesapeake Energy, informó la cadena de radio y televisión Democracy Now. [11] Por otro lado, una comisión estatal de Texas aprobó nuevas normas que permitirían a 36 Estados norteamericanos enviar residuos de bajo nivel radioactivo a un emplazamiento privado, ubicado sobre el acuífero Ogallala, que se extiende de Texas a Dakota del Sur, y suministra agua potable a casi dos millones de personas. La planta es de propiedad de un destacado recaudador de fondos republicano, destacó Democracy Now. La EPA anunció en febrero de 2012 que impondrá límites a los niveles permisibles de varios productos químicos tóxicos y cancerígenos en el agua potable. No obstante, la administradora de la EPA Lisa Jackson aclaró que la disposición tardaría entre tres y cuatro años en hacerse realidad. Notas: [1] Un estudio realizado entre 1996 y 2010 confirmó que de 321 fuentes de agua superficiales utilizadas para consumo humano, 273 están contaminadas. Las fuentes que carecen de plantas de tratamiento se encuentran principalmente en San José y Puntarenas, y de ellas 220 pertenecen a asociaciones administradoras de acueductos, 29 son administradas por las municipalidades, 19 por el AyA, y otras cinco por la Empresa de Servicios Públicos de Heredia. [2] Más de 9 mil obras ejecuta Nicaragua para mejorar la retención y el uso del agua con fines agrícolas y domésticos. Entre las inversiones figuran presas, represas, pozos y reservorios que recogen agua de lluvia. El Instituto de Desarrollo Rural trabaja en 8.782 instalaciones, el Ministerio del Ambiente y Recursos Naturales tiene a su cargo otras 307. [3] El programa HELP opera en 91 cuencas de 67 países. Por otro lado, Unicef invertirá este año en Angola 1,2 millones de dólares en servicios de salud, agua, educación y saneamiento ambiental. Según la ONU, en ese país africano la tasa de mortalidad antes del primer año de vida es de 115,7 por mil nacidos vivos y 193,5 por cada mil menores de cinco años. [4] Agua y minería transnacional, Horacio Machado Aráoz, http://www.bolpress.com/art.php?Cod=2011033103 [5] Para citar solo un caso reciente, a mediados del año pasado la compañía química Zhejiang Jinzhili Chemicals, con sede en la provincia Zhejiang de China, fue acusada de verter 12 compuestos químicos contaminantes al río Tiaoxi. Dos plantas de tratamiento de agua tuvieron que detener el suministro del preciado líquido en el distrito de Yuhang con una población de más de 848 mil habitantes. El suceso ocurrió pocos días después de otro hecho similar en el río Xin’aan, en la misma provincia, protagonizado por un camión cisterna que transportaba fenol. Por otro lado, en 2011 el gobierno de Mozambique suspendió una concesión aurífera de la empresa sudafricana Mamba Minerals en la provincia de Manica, tras comprobar que estaba contaminando el río Rovué. [6] Entrevista a la socióloga e investigadora argentina Marsitella Svampa, Fernado Arellano Ortiz, Observatorio Sociopolítico Latinoamericano WWW.CRONICON.NET [7] La transnacional se instaló en Honduras en 2000 y cerró operaciones en 2008. Investigaciones previas determinaron que la mina utilizó diariamente alrededor de 60 mil galones de agua. [8] Xstrata Níckel, cuarta compañía mundial en la explotación de níquel, pretende explotar en las nacientes de los ríos La Piedra, El Pino, Jumunucú, Jayaco, Jima y cientos de manantiales, cañadas y arroyos. La región juega un rol importante en el ciclo hidrológico y en la regulación del clima en República Dominicana. [9] El 4 de marzo el gobierno peruano anunció que la Superintendencia Nacional de Administración Tributaria (Sunat) controlará y fiscalizará el ingreso, permanencia y transportación de productos tóxicos, así como su distribución en territorio nacional. Se considerará transporte ilegal todo aquel traslado de materias químicas que no cuente con documentación respectiva. Sunat incautará los productos y medios de transporte utilizados, y si estos son contrarios a la salud pública, al medio ambiente o su tenencia esté prohibida, serán destruidos. Además, el ilícito fue tipificado en el Código Penal con una pena privativa de la libertad no menor de cinco ni mayor de ocho años. [10] Arturo Delgado, Revista Ecología Radical: www.ecologiaradical.com.mx 16 [11] En un reciente informe, senadores demócratas advirtieron sobre el peligro para la salud humana de 29 químicos utilizados en esas perforaciones, los cuales son considerados cancerígenos. Las compañías mantienen en secreto la lista de químicos que utilizan; una de ellas es Halliburton, la cual cimentó el pozo Macondo que estalló y provocó el derrame de crudo en el Golfo de México en 2010, recordó Democracy Now. * Con información de Prensa Latina, Democracy Now, Fobomade, Ecoportal,CENSAT Agua Viva, Amigos de la Tierra y Rel-UITA. Fuente:Redacción Bolpress (http://www.bolpress.com/art.php?Cod=2012030701)